¿Criticar es fácil pero actuar no tanto?

¿Criticar es fácil pero actuar no tanto?

 

Tannia Moya, Directora de Comunicación UNIMER 

Recientemente escuché una corta entrevista que le hicieron a Obama,   expresidente de los Estados Unidos que contenía un mensaje muy poderoso el cual me gustaría compartir con ustedes.

Obama dijo que era importante aprender a que las cosas se hicieran, porque en su vida se había encontrado con muchas personas, de todos los niveles, que son muy hábiles describiendo problemas, incluso personas muy sofisticadas que analizan por qué algo está mal. Personalmente creo que esto abunda y se ha hecho mucho más notorio con el crecimiento de las redes sociales.

Apuntaba también, que lo que realmente debemos buscar son  personas que, sin importar qué tan grande o pequeño sea el problema, digan “yo me encargo de eso”. Asegura él, que alguien con esa actitud, es imposible que deje de notarse. No puedo estar más de acuerdo.

Actualmente se habla mucho de un concepto que es el  «Accountability», no tiene una traducción como tal, pero habla de la responsabilidad y la acción proactiva que los líderes deben tener. En lugar de quejarse o buscar excusas, los líderes efectivos enfrentan los desafíos y buscan soluciones para hacer que las cosas sucedan. Esto aplica en todos los aspectos de nuestra vida.

Lamentablemente, criticar por criticar es el deporte favorito de muchos usuarios de redes sociales y a veces ni siquiera se informan del contexto en el que suceden los acontecimientos, son comentarios instantáneos, sin mucho pensamiento, sin compromiso y mucho menos responsabilidad.

Analizar los hechos antes de opinar, requiere de un esfuerzo extra, de tiempo y pensamiento, que no muchos están dispuestos a invertir.

De ahí la importancia de distinguir entre la crítica constructiva versus la  destructiva. Debemos diferenciar cuáles personas buscan con su opinión que mejoremos y aquellas que solo buscan desacreditar, en algunas ocasiones, amparados en el anonimato que la era digital les facilita.

Por otra parte tomar decisiones implica aceptar la posibilidad de cometer errores y eso no nos debe frenar, debemos tratar de actuar,  que implica asumir la responsabilidad de los resultados y muchas veces no estar exento de crítica.

Mi consejo ante esas personas que como yo se sorprenden de la facilidad con la que mucha gente dispara odio como francotiradores por doquier, es tratar de tener un enfoque saludable; discernir aquellos comentarios basura, a aquellos que pueden ayudarnos a mejorar, para ser más proactivos en nuestra vida. Por favor que exceso de análisis no nos paralice.

En resumen menos crítica y más acción, busquemos cómo actuar y mejorar nuestra condición de vida, nuestro trabajo y nuestro país, eso hará la diferencia, solo la acción produce un verdadero cambio.