A nivel mundial las PYMES representan la mitad de los puestos de trabajo formales, y en Costa Rica la mayoría de ellas son micro emprendimientos (70%), según datos del MEIC del 2015.
Sin embargo, enfrentan el reto de mantener su estabilidad, pues se estima que 8 de cada 10 PYMES no sobrepasan los 3 años de operación, y de aquellas que, si lo logran, el 69% no verán cumplir su primer decenio.
Sobre este interesante tema UNIMER Centroamérica realizó para #ConPYMES2017 un estudio en el cual se entrevistó a 206 encargados del proceso de comercialización dentro de las PYMES. Dicho estudio cuenta con un margen de error muestral de 6.8pp a un nivel de confianza del 95%.
Revela que 9 de cada 10 PYMES consideran que están alineadas con las necesidades del mercado al que atienden, con sus productos o servicios pero sólo la mitad tienen identificados claramente los segmentos a los cuales están resolviendo estas necesidades.
Tanto los segmentos como las necesidades del mercado, se definen a partir de la intuición y/o la experiencia directa con los clientes (84%); cabe resaltar que los empresarios y PYMES de menor trayectoria son quienes más aprovechan el conocimiento que pueden obtener de las redes sociales y la asesoría en Investigación de mercados.
Y en cuanto al plan estratégico, 4 de cada 10 PYMES cuentan con uno, y lo tienen documentado, especialmente las aquellas con menos de 5 años de operación (47%). Sin embargo, sólo para una cuarta de todas las PYMES entrevistadas este contiene indicadores medibles que les permite evaluar su avance y reorientar sus esfuerzos enfocados al crecimiento.
Aunque las ventas son un indicador claro del crecimiento sano de las PYMES, no en todos los casos se revisa contantemente, pues sólo la mitad de las PYMES tienen documentado el registro de ventas de los últimos dos años, siendo los empresarios y PYMES de más trayectoria quienes más están pendientes de este registro.
Por otra parte la mitad de las PYMES entrevistadas (48%) indican mantener objetivos claros de ventas para el logro de utilidades, sólo un 33% cuentan con una estrategia comercial definida con el objetivo de hacer crecer el negocio.
Con este panorama es importante reforzar entre las PYMES el valor de contar y medir el resultado de las ventas para desarrollar planes de acción en la gestión comercial, que les permitan mantener la operación e incrementar las utilidades.
Esto anudado a plataformas en las que las PYMES puedan compartir sus conocimientos y aprendizajes, pues los empresarios de mayor trayectoria cuentan con experiencia y tienden a ser más disciplinados en el registro de sus indicadores, pero aquellos más jóvenes pueden aportar una visión distinta de las estrategias, recursos y formas de hacer negocios, de manera que ambos consoliden sus negocios.
Katherinne Serrano Badilla
Directora de Proyectos de Investigación
UNIMER Centroamérica